En busca de la entrevista

Marta Romero Salgado

Hace a penas unos minutos he perdido la oportunidad de entrevistar a Manuel Benítez "El Cordobés". Pero he descubierto que en pleno centro de Eibar hoy hay un hormiguero de hombres más o menos jóvenes que te trasladan a Andalucía. No sabría deciros quién era y quién no andaluz, pero todos han conseguido contagiarme la ilusión y los nervios que suponen una corrida de toros. Nada más llegar corros de hombres hablan sobre el tiempo, si aguantara o no y un joven novillero, este sí que innegablemente era del sur, pregunta al organizador si es cierto eso de que por aquí llueve mucho. 

Se me acerca un hombre de unos cincuenta ofreciéndome conseguirme un autógrafo de Canales Rivera. Supongo que ver a una chica tan joven en este entorno llamaba su atención. Después de rodear por dentro y por fuera una plaza con muchos años de historia, conozco la noticia. Manuel Benítez a causa de un problema de salud ha decidido no acompañar a su hijo Julio hasta la ciudad armera. 

Pero un periodista, y más aún un principiante, debe estar preparado para que se le cierren las puertas y para encontrar alternativas. Asi que, después de estar una hora viendo a aquellas personas con sus niquis y sus gominas, me ha llamado la atención un hombre bajito, con un puro que no se separaba de su boca, un mono azul y una agilidad terrible para su edad. Este hombre es conocido como "chiquito" y vive todo el año para mantener la plaza, y para crear todos los materiales, banderines... que son necesarios. Un verdadero personaje al que le ha hecho verdadera ilusión el que le pidiera una entrevista. 

A veces las cosas no salen como uno esperaba pero, sinceramente, me alegra ver que mi profesión no solo da disgustos y también da alegrías. Todos tenemos algo que contar y creo que este hombre y todas sus peculiaridades dan para mucho.

En fin, pues eso que hoy me quedo sin la entrevista a Manuel Benítez pero me vuelvo a casa con un autógrafo de Canales Rivera, la ilusión de un hombre que ve reconocido su trabajo y una noticia sorprendente: los toreros se están tomando algo en el Batzoki. ¡Olé!